El equipo femenil de Gallos se instaló entre los mejores 4 equipos del torneo
Por José Luis Jiménez
Fotos de Víctor Pichardo
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Contrario a cualquier pronóstico, el equipo femenil de Gallos Blancos se instaló en las semifinales del Torneo Guardianes 2020, luego de imponerse 3-2 de visita a las rojinegras del Atlas y así ganar la llave con un marcador global de 4-4, pero el criterio del gol de visitante le dio el pase a la antesala de la gran final.
Las pupilas de Carla Rossi, habían perdido el primer partido en la capital queretana y muchos creían que no podían levantarse, sin embargo, la mentalidad y las ansias de triunfo, llevaron a un equipo queretano, a creer en si mismas y así enfrentaron un partido ante las rojinegras que no pudieron con el ímpetu y orden de las visitantes.
Desde los minutos iniciales, las atlistas querían finiquitar la llave y así vimos una llegada de la escurridiza Valeria Razo puso de nervios a las queretanas, sin llegar a más.
Atlas siempre tuvo a Alison González, como su mejor jugadora. Ella sola hizo una temporada de 17 goles, casi la mitad de todo el equipo y sobre el minuto 16 hizo valer su peligrosidad al recuperar una pelota y de media vuelta disparó, pero la pelota se fue fuera del área de Diana García.
Sin embargo, cinco minutos después vino el primer gol del cuadro local por medio de Joana Robles.
A las queretanas nunca se les vio bajoneadas a pesar de ir abajo en el marcador. Lucharon por la pelota y casi siempre la conseguían y así llegó el empate sobre el minuto 25, cuando Ana Gabriela del Atlas comenió un error en la salida y la goleadora queretana Lizette Rodríguez disparó fuera del área para empatar el marcador y acercarse en el global.
Las Gallitas necesitaban de dos goles más aunque el Atlas anotara otro, el número mágico para las queretanas, eran dos más y la historia se estaba escribiendo, pues sobre el minuto 34, Adriana Iturbe taladró a la defensiva queretana y anotó el 2-1 a favor de las rojinegras.
Para la parte complementaria, las gallitas tomaron las cosas con calma, les reafirmaron que necesitaban de dos goles más para seguir adelante y el empate vino al minuto 77 en una falta cometida dentro del área castigada con penal de Priscila Pérez.
Sin dudarlo Lizette Rodríguez, tomó el balón, lo puso en el manchón, se hizo para atrás, puso su mirada fija en la portería atlista, disparó y consiguió el empate.
Todo era felicidad, pero las gallitas nunca bajaron los brazos y a cinco minutos del final Adriana Orozco hizo que se le enchinara la piel a todos los queretanos al marcar el gol que le dio el pase histórico para Querétaro en el torneo femenil.